Sos como el porro, que todo lo mejora

Esta mañana la voy a dedicar toda entera a pensar en vos. Ya va la tercera vez seguida que empieza la canción que me dijiste que te mandó el gil de tu ex cuando cortaron. La canción dice que quiere olvidarte y no verte nunca más. Sospecho que los tipos quedan así después de que vos les pasás por encima con el auto.

Te idolatro. Creo que si yo fuera otro y me escuchara a mí hablar de vos, me tendría una envidia bárbara. En algo hay que creer, y yo creo en vos y en mí más allá de toda la mierda de hacerse viejo. Vos sabés que cuando estoy con mis amigos me imagino que vos estás con nosotros y que te quieren y que sos una más de la manada.

Sos como el porro, que todo lo mejora.

Recién uno de mis compañeros del colegio contó que anoche fue al cine con su esposa y a mí me dieron ganas de ir a darle un abrazo, pobrecito. Están esperando un hijo, y por eso ella dejó el trabajo. Te lo cuento porque sé lo que te provoca, estás entre pensar pobres animales o querer matarlos a tiros. Me gustaría regalarte un arma para tu cumpleaños. Con el arma vas a matar a los pelotudos que bautizan a los hijos, a los boludos que les dicen gorda a las novias, a las pobres idiotas cuyo centro de su vida es parir seres humanos y entonces cuando esa gloria les llega ya no pueden hablar de nada que no sea de la mierda que caga su cría, cuántas horas duerme y lo mucho que se parece a algún pariente. Te imagino matándolas de noche, mientras duermen. Imagino que las despertás y con cariño les explicás lo que está por pasar. Después matás a la cría en frente de ellas.

Imagino que limpiás toda la mierda del mundo.

Yo soy fan de vos.

Anoche les dije a mis amigos que todos nos tienen envidia. Que nadie está tan arriba como nosotros. No sabés la emoción que teníamos. Nos reíamos sin parar. Ahora pienso que con nada hacemos todo. Está sonando una canción de tu banda preferida en el mundo, que dice que si volviera a comenzar, no tendría tiempo de reparar, y también todas las verdades que pueden entrar en una canción.

Estoy prendido de una certeza: cada vez que estás por besarme en la boca yo compruebo que todo lo que pasó antes estuvo bien, que todo lo que hice me trajo hasta acá y hasta vos. Y ahí me ilusiono como cuando la agarra Lío en tres cuartos de cancha y uno sabe que va a contemplar la maravilla.